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Venciendo aún cuando me siento derrotado
Sentirse derrotado no siempre es malo. Aún más, éste es un sentimiento normal que todos hemos experimentado. Tal vez no nos gusta reconocer nuestra debilidad y fragilidad humana, por eso […]
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Nuestra vida emocional se encuentra dañada y necesitamos sanidad…. En algún o muchos momentos de la vida nuestras fuerzas están dedicadas a alcanzar esa sanidad. Pero… ¿Cómo?
Y es que esto es complejo ya que la sanidad no es instantánea y eso es lo que buscamos, una escapatoria a no sentir más dolor, pero ¿Tal escapatoria, realmente existe?
La sanidad más bien es presentada por Dios como un proceso, que en mucho depende de lo que tengamos en nuestra lista de pendientes, muchas veces esos procesos de sanidad incluyen más áreas de las que creemos. Proverbios 4:18 nos dice: Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto. Vamos aprendiendo sobre la marcha.
Ahora bien ¡Dios si es perfecto! Esta es la buena noticia. El resultado de estos procesos de sanidad se convierte en la respuesta al ¿Por qué? de la prueba. No tener el control en ocasiones es lo que nos desespera, como tener el control sobre algo que no entendemos.
¿Sabemos cuál es el objetivo?
¿Cuánto tiempo tardaremos?
¿Cuál camino debemos seguir?
En ocasiones son más las preguntas que respuestas, tenemos mas temores que seguridades, mas dolencias espirituales que fortalezas. Si te has sentidos o te sientes así. ¡Buenas noticias! nada de eso es crítico para poder completar tu sanidad. El secreto es: No depende de ti, Dios lo hará, una y otra vez el lo hará. En Habacuc Dios nos regala esta promesa: (Habacuc 2:3) Aunque la visión tardará aún por un tiempo, más se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.
Dios nos creó, Él nos conoce, no nos pondrá jamás a llevar una carga que no somos capaces de sobrellevar. Si nos toca repetir la prueba, no te preocupes, no te desesperes, es un maratón no una carrera corta de velocidad. ¡Tú puedes! solo mantenerte firme.
Disponer el corazón, en síntesis, es la única parte que nos toca durante ese proceso, Él nos perfecciona lo va a hacer con cuidado, recuerda, somos su especial tesoro. No se apresura, nos contempla y verifica que nada más requiera trabajo.
Cuando sientas que la sanidad toma mas de lo que pensaste, da gracias Él lo está haciendo perfecto. Disfruta tu tiempo especial con TU padre, háblale y escúchale. Estas etapas nos hacen crecer espiritualmente más que cualquier otra.
Da Gracias una y otra vez, lo entiendas o no.
Versículos
Proverbios 4:18 nos dice: Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto. Vamos a ir aprendiendo sobre la marcha.
Habacuc 2:3 Aunque la visión tardará aún por un tiempo, más se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.
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