Mucho fruto: Abraham

Hanssell Morúa 23 mayo 2021 280

A la edad de noventa y nueve años Dios le cambia el nombre de Abram por Abraham, de Padre Exaltado a Padre de Multitudes. Abraham vive hasta los 175 años. Viéndolo en porcentajes, había vivido el 56 por ciento en su mediana edad. Esta época se caracteriza por una evaluación del fruto que uno ha tenido en la vida. Algunos nos deprimimos o logramos ajustarnos a tener una vida de plenitud y paz . Parece irónico, tener por nombre “Padre de Multitudes” cuando su esposa Saraí era estéril. Pero llegan a tener a Ismael con la esclava Agar. El niño tenía una edad de 13 años cuando por fin Saraí (que también le cambian el nombre por Sara) logra tener a su hijo Isaac. Por cierto, Isaac significa risa, porque Abraham se rió cuando Dios le promete tener un hijo. Pensemos entonces que aunque todo parezca imposible, para Dios no hay imposibles. Dejémonos en sus manos para que Él haga ese milagro en nosotros. Descansemos en Él y escuchemos sus palabras. Esas son las que pueden transformar nuestra vida para que de mucho fruto.

Génesis 17:5-10
5 “Y no se llamará más tu nombre Abram,[a] sino que será tu nombre Abraham,[b] porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes.(A)
6 Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti.
7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo,(B) para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.
8 Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua;(C) y seré el Dios de ellos.
9 Dijo de nuevo Dios a Abraham: En cuanto a ti, guardarás mi pacto, tú y tu descendencia después de ti por sus generaciones.
10 Este es mi pacto, que guardaréis entre mí y vosotros y tu descendencia después de ti: Será circuncidado todo varón de entre vosotros.(D)”

Génesis 17:15-20
15 “Dijo también Dios a Abraham: A Sarai tu mujer no la llamarás Sarai, mas Sara[c] será su nombre.
16 Y la bendeciré, y también te daré de ella hijo; sí, la bendeciré, y vendrá a ser madre de naciones; reyes de pueblos vendrán de ella.
17 Entonces Abraham se postró sobre su rostro, y se rió, y dijo en su corazón: ¿A hombre de cien años ha de nacer hijo? ¿Y Sara, ya de noventa años, ha de concebir?
18 Y dijo Abraham a Dios: Ojalá Ismael viva delante de ti.
19 Respondió Dios: Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac;[d] y confirmaré mi pacto con él como pacto perpetuo para sus descendientes después de él.
20 Y en cuanto a Ismael, también te he oído; he aquí que le bendeciré, y le haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes engendrará, y haré de él una gran nación.”

I. Mucho fruto viene cuando cambiamos el enfoque de lo que vemos.

A. El cambio de enfoque requiere que observemos diferentes aspectos, hasta aquellos que ni siquiera estemos considerando.

La vida nos trae cosas y sorpresas que no podríamos ni imaginar. Tener una expectativa de lo bueno, hace que nos sintamos contentos. Es una actitud de contemplación de lo bueno, lo perfecto y lo eterno. Observe las estrellas, cuéntelas. Así nos llenamos de admiración.

B. Haré naciones de ti.

El proceso de crecimiento se da paulatino. Primero Dios le dice: “haré de ti una nación grande.” Luego le dice: “haré naciones de ti,” en plural. Ismael es el padre de las naciones árabes que han traído muchos beneficios a la humanidad. Empieza con una buena acción. Luego vienen varias.

C. Reyes saldrán de tí.

Lo maravilloso es poder ser un instrumento para la formación de reyes, líderes con autoridad que son usados para que traigan un bien aquí en la tierra. Enseñar estos principios traen mucha satisfacción al ver en otros una vida fructífera. Esto es algo generoso que se desarrolla con libertad.

II. Mucho fruto viene cuando entramos en relaciones de pacto.

A. Será circuncidado todo varón entre vosotros.

La circuncisión es una actitud del corazón, de no dejar ninguna mala semilla que crezca. La idea de todo varón viene del rol del Padre en la Trinidad. Su corazón es de bendecirnos a través de Jesús. Esta es la base para una vida de mucho fruto.

B. No la llamarais Saraí, más Sara será su nombre.

La hermosa historia del pacto se refleja en las Bodas del Cordero. Saraí significa Princesa y Sara “Mi Princesa” o Reina. Cuando nos comprometemos en comunidad somos la novia del Cordero. La imagen de Sara se relaciona a la escogencia del rey en medio de un concurso de mujeres. Así como fue Ester, quien sustituyó a Vasti, hermosa también pero impetuosa y desobediente.
En medio de una relación deleitosa y armoniosa nuestras vidas siempre van a dar mucho fruto.

C. La relación de pacto trajo hasta Ismael la bendición.

Ismael significa “Dios oye ó A quien Dios oye”. A pesar de que muchas veces no creemos en el plan que Dios tiene para nosotros, Dios escucha nuestras oraciones y endereza nuestro caminar. El corazón de Dios es que todos procedamos a arrepentimiento, esto nos da el camino de restituir y hacer cosas buenas. El tener doce príncipes y hacer una nación grande también alcanzó a Ismael. Nosotros podemos venir de naciones que tuvieron muchos errores a través de nuestros ancestros pero la esperanza que tenemos en las promesas a través del Hijo de Dios por medio de la fe es libertad para tener mucho fruto.

Conclusión:
El cambiar el enfoque de nuestra vidas a través de un nuevo nacimiento en Jesús nos trae mucho fruto. Es un caminar paulatino. Somos como un árbol derivacional. Empezamos siempre con algo muy sencillo y crecemos en diferentes opciones, para alcanzar una producción infinita. Así es nuestro Dios creativo y nos comparte su naturaleza. Esto se da en una relación de compromiso y pacto, como un matrimonio con Dios; circuncidando lo malo del corazón y rectificando nuestras acciones en proyectos de bien para toda la humanidad.

Mucho fruto: Abraham
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