play_arrow

keyboard_arrow_right

skip_previous play_arrow skip_next
00:00 00:00
playlist_play chevron_left
volume_up
chevron_left
  • Home
  • keyboard_arrow_right Blog Renueva
  • keyboard_arrow_right La insatisfacción es pésima consejera

Blog Renueva

La insatisfacción es pésima consejera

Gabriela Umaña 4 octubre 2021 168 5


share close

¿De pronto sientes que todo va demasiado rápido? Los días pasan volando entre pendientes y compromisos, las semanas se acaban en un abrir y cerrar de ojos, ya casi llega la Navidad y cuando nos damos cuenta estamos celebrando nuevamente el día de la Madre, es decir todo pasa cada vez más rápido.

Y así como los días y los meses se aceleran en la vida moderna, las tendencias y las “necesidades” parecen también hacerlo, ahora “necesitamos” muchas cosas y no solo eso, las “necesitamos ya”. Y hago énfasis en la palabra necesitar, porque realmente muchas de ellas no lo son, pero eso es lo que la sociedad, el comercio y nuestro entorno nos hace creer.

Pero ¿por qué estoy comentando todo esto?, bueno, porque últimamente he estado pensando mucho en la insatisfacción y cómo es que llegamos a ese estado.

Me sorprende muchísimo cuando me detengo a pensar en por ejemplo lo rápido que las cosas dejan de tener valor, compramos un celular último modelo y al cabo de algunos meses ya hay 1 o 2 últimos modelos más, y el nuestro ahora “es viejo”. Y todo esto hace que constantemente quizá estemos comparando si lo que tenemos es realmente bueno o ya necesitamos mejorar.

Mi esposo y yo cuando nos casamos nos fuimos a vivir a un apartamento que si bien era pequeño, nos encantaba, era lo que necesitábamos y lo que nos hacía sentir felices. Al tiempo llegó la pandemia y aunque yo ya trabajaba en casa, el también comenzó a hacerlo y el apartamento nos empezó a quedar un poco pequeño, entonces empezamos a buscar un espacio más grande para poder acomodarnos mejor. Para hacer corta la historia Dios hizo un milagro y nos pasamos a vivir a una casa, pasamos de tener 1 cuarto a tener 3 por ejemplo y así cada área de la casa actual es mucho más grande que la anterior, este claramente es el resumen de un proceso que no fue corto y que nos tomó mucha oración, consejo y buscar que Dios nos diera paz para tomar decisiones correctas.

Tenemos unos 5 meses en la nueva casa, nos acomodamos súper bien y de verdad que ha sido una bendición estar acá, perooooo de pronto es muy fácil encontrarnos pensando (con algo de sentido de urgencia) en “necesitamos agrandar este espacio un poco”, sería súper bonito cambiar esto de lugar, etc… y en medio de eso por un momento dije ¿QUÉEEEE? ¿Necesitamos?, hace 5 meses vivíamos en menos de la mitad del espacio del que vivimos ahora y de pronto tenemos urgencia en hacer cambios?

Con eso no quiero que me mal entiendan, no es que buscar mejorar o hacer cambios esté mal porque cada situación es diferente y si todas las cosas se dan para que pasen genial, pero con lo que sí debemos tener mucho cuidado es con ese sentido de insatisfacción que muchas veces es muy sutil y es pésima consejera, porque nos hace tomar decisiones apresuradas.

Insatisfacción es un sentimiento interior que experimenta una persona cuando siente que una realidad determinada no cumple sus expectativas, y acá es donde quería llegar y te hago una pregunta: ¿Lo que estás queriendo hacer está guiado por las expectativas de Dios o las tuyas? 🤯 
El problema quizá no sea el deseo o el querer hacer cambios en nuestra vida, tener mejores cosas, cambiar de trabajo, etc… El problema puede ser la motivación. Cuando la motivación es externa y por tendencias, modas, demandas de otros o cargas que nos hemos puesto a nosotros mismos empezamos a llenarnos de insatisfacción, fácilmente empezamos a ver con menosprecio todo lo que tenemos y a todas esas cosas por las que mucho tiempo oramos y hoy tenemos, les restamos valor o las empezamos a comparar.

 

Por eso de verdad debemos aprender a hacer pausas para analizar nuestros pensamientos, motivaciones y lo que estemos buscando, no porque esas cosas estén mal, sino porque si la fuente no es la correcta de verdad nos puede meter en muchísimas presiones y agobios que podemos evitar.

 

Así que mi motivación es para que bendigas y agradezcas HOY lo que tienes y te llenes de esperanza con lo que el futuro tiene preparado, a soñar con cosas grandes PERO a siempre buscar ese aval de Dios y ese respaldo que vale cualquier espera. Y si en algún momento te sientes perdido o perdida, no dudes en buscar consejo de alguien que tenga la capacidad y el deseo real de ayudarte a ver las cosas desde otra perspectiva (en mi caso siempre encuentro ese consejo aquí en Renueva) y estoy segura que Dios sabrá premiar GRANDEMENTE cuando haces las cosas con calma, buscando la paz y sabiendo que querer está perfecto cuando a motivación no hace que tomemos decisiones apresuradas que luego traen agobios a nuestra vida

 

“Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han entrado al corazón del hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman”  1 Corintios 2:9

 

Rate it
Previous post
Post comments (0)

Leave a reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *